Hablemos de una de las obras más populares del mangaka Riichi Ueshiba titulada “Nazo no Kanojo X“, conocida en inglés como “Mysterious Girlfriend X”, una obra de amor y romance lanzada por primera vez en la temporada de invierno del 2006, en la revista Monthly Afternoon de Kodansha. Inicialmente recibió una adaptación animada en el 2012 contando con 12 episodios y un OVA estrenado en el mismo año. La obra destaca esencialmente por su particular premisa y personajes envueltos en la más alta clasificación de diseños y escenarios primarios, aunque no recurrente, de espacios adornados con toda clase de objetos e individuos.
Para oficios prácticos, el primer volumen del manga será el material de estudio de esta ocasión, contenien el contenido inicial e introductorio de la obra, donde se destaca principalmente el cambio de atmosfera cuando una chica transferida a una nueva escuela conoce más a fondo al estudiante que se sienta a su lado, tras eventos que involucra a ambos personajes una química misteriosa e inusual surge en ellos.
El primer volumen contiene los capitulo 0, 0,5, 1, 2, 3 y 4 una primera impresión y desarrollo que sienta las bases iniciales del romance entre Urabe y Tsubaki, conflictos y algunas situaciones para entender la historia de lleno.
El inicio inesperado
En un inicio donde todo trascurre, como pensamos, una premisa muy agotada en la industria, algo que sin duda no puede aburrirme porque presenta un punto de partida lógico para un desarrollo prometedor. Ciertamente el punto fuerte del primer contacto es la pacífica aparición Urabe frente a la clase y que da inicio a la relación entre ella y Tsubaki.
La obra no tarda mucho en adueñarse de elementos típicos de estas historias y convertirlos en una conexión atípica entre los personajes principales, por otro lado, el manejo de emociones llevado en un terreno fuera de lo común, separa a la obra de un resto común de tramas similares, utilizando como método esencial la saliva.
Cunado se introduce alguno de los elementos más comunes del genero como la confesión y su posterior revelación, en conexión con el predestinado vinculo “salival” que los conecta, provee una de las escenas y pruebas de confesiones más resonantes que he visto alguna vez, marcado principalmente por su reacción inesperada, un elemento que ha sido el factor distintivo a otras obras.
Me sorprende mucho los elementos usados para la interpretación del vinculo que se ha generado en un inicio como acto de unión, por otro lado, los diferentes ambientes y sensaciones de algunos paneles (incluyendo el primero del manga), genera un ambiente especialmente nostálgico como era característico de la época.
Cambios y perzolanidades
Claramente la intención del autor desde este punto se refleja en desvelar identidades y personalidades de los personajes, cosa que logra acoplar muy bien en los paneles iniciales donde, aunque, no parece intencional, transmite un aura de melancolía, las situaciones que ponen a prueba la decisiva relación entre ambos le dan el soporte adecuado a la incesante deuda de su relación. El éxtasis de las situaciones con las que ambos exploran su relación en parte es el mayor cumplido de la obra.
Cuando hablamos de la monotonía en las relaciones aparecen las dudas que complican la situación qué se este presentando, durante estos momentos, se puede notar como la intención inicial es reflejar, como los vínculos que unen a ambos son esencialmente más grandes que la monotonía.
En particular, los paneles de las escenas que demostraron el vínculo existente entre los personajes son algo indiscutiblemente asombroso cada vez que se revise, pienso que el autor quiso demostrar como estas situaciones, aunque peculiares, presentan las pruebas necesarias para el entendimiento de la peculiar situación romántica y sirve de entrada para situaciones más surrealistas apoyadas en la premisa de la saliva.
Las personalidades de ambos empiezan a desvelar distintas expresiones que acompañan las diferentes reacciones y sentimientos del uno por el otro, a decir verdad la participación corta y fría de Urabe es especialmente fugaz y aunque deseé que se explorase más de sus sentimientos, parece como si la idea y personalidades desarrolladas en estos primeros capítulos fueran apaciguadas por unos más comunes en futuros episodios, lo que genera opiniones mixtas sobre el misterio de Urabe, pero adorando el resultado final en cierta medida.
Ahora bien, parte del plato fuerte acontece con el dilema más importante presentado, algo que marca un precedente de la relación y presenta una nueva pauta para la serie, un cambio que particularmente continua con el tono de la obra de anteriores episodios, aunque la participación y resolución del arco de la ex presenta varias consistencias entre el cambio, el tono y causa de Tsubaki por caer en las situaciones donde pone a prueba su relación con Urabe son de alguna manera, duras con el personaje.
Aunque me parece acertado que la trama se desarrollase en un episodio tan temprano, ciertamente deja sin dinamismo de profundidad a tramas que pintaban desde un inicio como profundas y largas, acá se puede ver un claro prospecto entre el amor de Tsubaki y el amor de Urabe, el mensaje es claro y me permitió por un instante observar una situación llevada a un terreno más general, con lo que pude disfrutar su desenlace.
Mientras más se conoce a alguien, más sorpresas aparecen quizás más dudas y curiosidades, un mensaje directo y que a apreciación propia es un elemento de “conector” decisivo para el resto de la obra hasta su fin.
No puedo negar que las emociones son capturadas por la obra cuando Tsubaki empiza a dar el siguiente paso en su relación con Urabe tras lo visto con su amigo Ueno, esto realmente despertó el romance de la obra que hasta ahora había sido mezclada con un erotismo perspicaz.
La prueba
Francamente el lado contrario de lo que se ofreció anteriormente con la ex de Tsubaki, es un camino común para las obras de este tipo, no se puede culpar el buscar las cesaciones en sentido contrario, sin embargo, el principal problema con el rival de Tsubaki aparecido en el cuarto episodio, es la participación compartida entre Tusbaki y Urabe en cada situación.
Ciertamente sentí un esfuerzo narrativo inmenso para de meritar y fijar la personalidad de Tsubaki como un hombre “indeciso”, objetivamente, los escenarios eran diferentes por un contexto profundo y también hay que sumar la petición dada por su novia de no entrometerse, sin embargo, esto no sería un problema si la actitud de “único e inalcanzable” de Tsubaki no fuera un factor que se repetiría en algunas situaciones futuras. Admitiendo ciertamente eso, el personaje de Tsubaki demuestra momentos de indecisión.
La protagonista de este suceso es para mi Urabe que demuestra a través de sus decisiones donde desea llevar el rumbo de su decisión, esencialmente me gustó como la trama envuelve a ambos personajes y aún mantiene las líneas básicas que hizo popular a la obra. La prueba en esencia representa el vínculo de ambos y apelando al recurso principal de la obra, creo que no puedo desenvolverse de otra manera, como en ocasiones anteriores, esta relación me deja un buen sabor de boca donde tras cada adversidad los personajes son cada vez más unidos, además la creatividad del autor para generar los desenlaces se me hacen geniales.
Finalmente durante la publicación del último capítulo de la obra, el autor decidió darle otro diseño a Urabe para presentarla de una manera más “elegante”, ciertamente un cambio que no puedo dar el visto bueno o negativo, personalmente creo que la visión del artista debe ser como la ve y la percibe, la originalidad de la Urabe del 2006 considero que es mejor para la obra. Por otro lado, amé el arte de paisajes y fondos de los primeros paneles de los volúmenes, me intrigó y fascinó el arte de los espacios y sueños de Tsubaki, algo que me recordó mucho a Elfen Lied y me causó las mismas emociones de desánimo, con ello no quiero decir que me desmotivara, más bien me sentí más intrigado en conocer el enigma de la obra.
Sin duda una primera parte que a opinión personal me cautivó para poder leer toda la obra en tiempo record, si tuviera la oportunidad de leerla de nuevo sin saber de ella lo haría, la historia es desconcertante ciertamente y su primer volumen capta lo mejor que ofrece la obra, espero continuar y releer cada capitulo del manga.